Pero antes de las sesiones de investidura, los responsables de los partidos más votados debes ser recibidos por el jefe de Estado, en este caso el rey Felipe VI, que es el encargado de, a uno de los candidatos, pedirle que formen gobierno, es decir, es el rey el que pide a uno de ellos que intente formar gobierno. Lo lógico ,y lo que ha ocurrido siempre, es que se lo proponga en primer lugar al partido más votado. Si este partido no consigue los apoyos suficientes el rey tiene dos opciones y es aquí donde nadie puede decidir por él, pues es potestad del monarca únicamente. El rey puede dejar que ese candidato más votado no consiga los apoyos suficientes y que , una vez pasados dos meses de la primera sesión de investidura, las cortes se autodisuelvan y se convoquen nuevas elecciones o tras un tiempo prudencial, si el primer candidato no consigue ser elegido presidente, el rey puede proponer otro candidato, en este caso suele ser el que ha quedado segundo en las elecciones. Si este tampoco lo consiguiera, pues el rey o bien elige a otro ( poco probable) o esperar a que pasen los dos meses.
Por último y para entender bien todo este proceso, falta analizar las votaciones de la investidura. Aquí hay dos momentos clave. La primera sesión de investidura exige que el candidato sea elegido con mayoría absoluta en votos. Debe sacar, al menos, 176 de los 350 votos.A esta votación solo puede presentarse aquel al que el Rey le ha mandado formar gobierno . Tras estas elecciones esto es poco probable, por lo que a partir de la segunda y sucesivas sesiones solo hace falta mayoría simple. La mayoría simple es que, entre los votos emitidos haya más a favor que en contra, por lo que aquí las abstenciones juegan un papel importante, pues no bloquean al candidato más votado. En esta segunda ronda ya se puede presentar cualquier diputado, no es necesario que sea el designado por el Rey. Aquí Rajoy podría intentarlo de nuevo pese a haber rechazado intentarlo en primera vuelta. Si tras dos meses nadie saliera elegido, las cortes automáticamente quedan disueltas y 55 días después, como marca la ley, quedan convocadas nuevas elecciones. El 26 de junio sería el día.