sábado, 17 de mayo de 2014

Destrucción

Solo ceniza  es lo que encontré en aquel viejo cenicero, recuerdo de un tiempo pasado, antes de la tormenta de fuego que arrasó la ciudad y se llevó, con su ímpetu todo vestigio de nuestra humanidad, de nuestro raciocinio, aquel que nos llevó a dominar el mundo y por ende a acabar con él. Nunca lo vimos, pero en el horizonte se intuía el fin, esos caóticos presagios que manchaban  el cielo y que parecían indicar el camino. Solo quedó eso, ceniza de un paso fagocitador que engulló todo menos el recuerdo de un tiempo que ya pasó, que nunca volverá.

sábado, 10 de mayo de 2014

Maratón

La lluvia de fuego que lentamente devoraba la ciudad debía finalizar. El mensaje debía ser entregado. Los dioses estaban de mi parte. El dolor que subía desde mis pies y llegaba a mis entrañas no podía hacerme desfallecer, no les podía fallar. El destino de un pueblo estaba en aquel pergamino manchado por mi propia sangre que abrazaba mi cuerpo. Por fin llegué a los pies de aquel olivo,no pude entregar nada, las piernas se doblaron sin más y mis ojos emblanquecieron; lo único que atiné a decir fue: ¡Victoria! Después nada, silencio. Esos 42 Kilómetros acabaron con mi ser, pero no con mi leyenda.