Me voy.... por segunda vez

El "me voy" de Ronaldo no le suena nada nuevo al aficionado merengue. Ya ocurrió en 2012 cuando "estaba triste" porque el Madrid no le había apoyado lo suficiente en la elección del balón de oro. Todo se arregló con una renovación y un aumento de sueldo. Aquella vez solo jugó. En 2017 vuelve a jugar, pero esta vez con fuego.

   Aquel 2012 el madridismo sabía que los mejores años del portugués estaban por llegar, tres balones de oro posteriores y otras tantas champions lo atestiguan, pero ahora, 5 años después hay cosas que quizás el madridismo no perdone y, al final, acabe quemándose.

  El de Madeira bien es verdad que ha sido el absoluto protagonista de las últimas eliminatorias de la Champions y que en la final dejó su sello, con medio balón de oro ganado de nuevo, pero este año probó los sinsabores del Bernabéu, donde en más de una ocasión fue pitado por parte del coliseo blanco (Zidane, Míchel y otras tantas estrellas también fueron pitadas). Pero este " me voy"  parece responder a otros derroteros. 14,7 millones de Euros pueden ser la razón, dinero por el que Hacienda lo puede sentar en el banquillo de los acusados. Algo no les cuadra en las declaraciones a los inspectores de Hacienda.

  Nadie sabe la razón por la que Ronaldo, manta en la cabeza, quiere despedirse de la que es su casa desde 2009. ¿Qué culpa tiene el equipo, los aficionados y los directivos de que hacienda le investigue? Es muy fácil, si es culpable que pague, si no los es, pues que no pague, pero el R.Madrid es bastante más grande que Ronaldo, su entorno y la isla de Madeira al completo.

  Como aficionado blanco no quiero que un jugador de la enjundia del portugués se vaya por la puerta de atrás por eso motivos extradeportivos y más cuando parece que vive una segunda juventud en su nuevo puesto de delantero, pero también es verdad que el aficionado, el que de verdad sufre los partidos, puede no estar dispuesto a ser chantajeado de nuevo como en aquel 2012 que un aumento de salario acabó con la tristeza del jugador. Aquella vez no había fuego, era septiembre y el mercado estaba cerrado, ahora está por abrir y con 32 años a la espalda el final de su carrera se acerca, por lo menos en la élite y puede que el madridismo ya se haya cansado de las estrategias de tu agente Mendes y de defender a capa y espada tu actitud dentro y fuera del campo.

  Esta vez, vaya a ser que no te acabes quemando, aun a sabiendas que eres muy grande gracias a que estas en el más grande, que nunca se le olvide a nadie que se ponga esta camiseta y si no que le pregunten a Ozil, Higuaín o al  propio Di Maria. Además, antes de irse debe pagar su traspaso, y barato, lo que es barato, no creo que lo pongan los directivos blancos.