Corría el año 753 a.C. Cuando según la leyenda los hermanos gemelos Rómulo y Remo fundaron Roma. Luego, Rómulo tras una fuerte discusión con su hermano mató a Remo al ejecutar una supuesta clausula que ellos mismos crearon ( al fundar la ciudad dijeron que el cruzase los límites de la ciudad sería ejecutado. Tras la discusión de los hermanos, Remo lo cruzó. Rómulo ejecutó la clausula. Más bien parece una lucha de gladiadores, pero esa los palos rojo y azul). Lógicamente estos hechos son parte de la leyenda sobre la fundación de Roma. Independientemente del momento y la forma en la que surgió la ciudad, la realidad es que entorno al río Tíber surgió primero una poderosa ciudad, ROMA, que poco a poco se fue haciendo grande y conquistó todos los terrenos que la rodeaban. Toda la península italiana de forma rápida. Posteriormente fueron cayendo los terrenos que daban al mar Mediterráneo. De ahí viene su nombre, Mare Nostrum. Desde finales del siglo I a.C. El imperio romano consiguió tener bajo su posesión todos los terrenos que daban a este mar.
Con el paso de los siglos los romanos se fueron asentando e imponiendo sobre el resto de sus enemigos. Su sistema se basaba en la expansión territorial, en el botín que conseguían con esas conquistas y en los esclavos,la mayoría capturados en las expediciones militares. Desde el siglo I d.C. Roma ya tenía definidas sus fronteras y se dedicó a defenderlas. Siempre se ha dicho que mejor la mejor defensa es un buen ataque, razón por la que poco a poco el sistema romano se estaba colapsando y los problemas internos iban en aumento. Problemas económicos, guerras civiles, asesinatos de altos cargos, aumento descontrolado de los impuestos e incapacidad de gobierno de muchos de sus emperadores ( a excepción de los asesinatos y las guerras, acabo de describir la España actual) El esplendor romano se iba apagando lentamente. El español lo hizo hace muchos siglos.
Todas estas acciones no pasaron desapercibidas por los pueblos vecinos de los romanos, sobre todos los situados al norte de Europa, conocidos por los propios romanos como pueblos Bárbaros ( bárbaros no era entendido por Roma solo como brutos o bestias, bárbaros procede del Latín Barbaroi, que significa extranjero, aunque también rudo, descuidado.
A esto hay que añadir que el cristianismo, antes duramente perseguido por los romanos, estaba penetrando en todas las capas de la sociedad. La inestabilidad era tal que el emperador Constantino fundó en el año 330 la ciudad de Constantinopla, ciudad realizada a imagen y semejanza de Roma sobre la antigua Bizancio. Constantino, el emperador que en el año 313 había concedido libertad religiosa ( incluso dicen que llegó a ser bautizado bajo el rito cristiano) trasladó la capital de su imperio a esta ciudad situada en el Estrecho del Bósforo ( en la parte europea). Pocos años después, concretamente a la muerte del emperador Teodosio en el año 395, el Imperio Romano fue dividido en dos zonas diferentes para proteger mejor sus fronteras. Por un lado está la zona occidental, conocido como Imperio romano de occidente, con capital primero en Milán y luego volvió a Roma. Esta parte del Imperio englobaba la zona europea. La otra división y con capital en Constantinopla se denominó Impero romano de Oriente. La primera zona se la quedó Honorio, hijo de Teodosio y hermano menor de Arcadio, que se quedó la zona de Oriente.
Una vez disgregadas las dos zonas, será la oriental la que siga evolucionando mientras que el caos será cada vez más evidente en la occidental. Finalmente los godos en el año 476 depusieron al último emperador romano, Rómulo Agústulo y acabaron con el poder de los latinos. Es curioso que según la leyenda el primer Rey fue Rómulo y el último emperador también se llamó así.
La zona de oriente se quedó libre de estas invasiones y siguió existiendo durante 1000 años más bajo el nombre Imperio Bizantino. Poco a poco y con el paso de los años la influencia romana se fue diluyendo a excepción del reinado de Justiniano (527- 5659 que intentó y casi consiguió unificar bajo su poder todos los territorios de la antigua Roma.
Será el mundo griego, el que aunque había sido absorbido por los romanos, ejercerá cada vez más influencia en Constantinopla, ciudad esplendorosa dado el inmenso comercio que cruzaba frente a sus costas adentrándose en el mar Negro. Fruto de esta influencia será la sustitución del Latín por el griego como idioma oficial y la separación de la Iglesia Católica por la Ortodoxa.
Los principales rivales de los bizantinos serán los propios pueblos germanos, que acabaron con sus hermanos romanos, por el norte. Por el sur, su principal amenaza será el mundo islámico.
El Islam, la conocida religión monoteísta ampliamente distribuida por todo el mundo, no existía antes del año 600 de nuestra era. El fundador de esta religión fue Mahoma, un comerciante árabe que vivía en la Meca. Si, era árabe antes de crear la religión musulmana, puesto que el término árabe hace referencia a los habitantes de la península de Arabia, nada tiene que ver con los musulmanes, que es con el término bajo el que se conoce a los seguidores de la religión islámica.
Pues bien, Mahoma, una vez que se casó con una viuda adinerada recibió la llamada de su Dios, concretamente llamado Alá y comenzó a predicar una nueva religión, el islamismo. El profeta islámico no lo tuvo fácil. De hecho, en su ciudad natal, llena de adinerados comerciantes politeístas , esta religión donde se debían someter a un único Dios, no caló hondo. El propio Mahoma huyó en el año 622 de la Meca hacia la ciudad vecina de Medina. Esta huida, conocida como la Hégira, marca el inicio del calendario musulmán.
Desde este momento y una vez que el profeta se encontraba instalado en la ciudad de Medina comenzó lo que a día de hoy, casi 1500 años después no han acabado, la Yihad o guerra Santa, que no es más que, al considerar que los no musulmanes son infieles, pues hay que someterlos Antes pasa, pero esos argumentos a día de hoy quedan algo desfasados, pero allá ello s y su guerra Santa.
Volviendo a Mohammmed ( Mahoma escrito en árabe) 8 años después de salir a uñas de caballo de La Meca, volvía triunfante y la conquistaba en nombre de Alá. Desde aquí el mundo islámico no dejo de extender su dominio. Primero por África, luego por parte de Asia, hasta intentar penetrar a Europa por España, donde poca oposición tuvieron en los visigodos hispanos. Europa ( que no España) se salvó de Alá gracias a que un mayordomo de palacio franco ( una especie de Primer Ministro. El Sarkozy medieval) los derrotó en la batalla de Potiers en el 732.
Los descendientes de Mahoma, convertidos ya en Califas ( líderes políticos y espirituales) fueron conformando una religión muy restrictiva y prohibitiva con sus fieles. Todas sus normas y formas de vida quedaron recogidas en su libro sagrado, el Corán. Que si rezar 5 veces, pasar hambre durante el día en el mes del Ramadán para inflarse a comer por la noche, prohibirles tomar bebidas alcohólicas Lo del cerdo es posterior al Corán. Supongo que lo añadieron como nota al pie de página.
Pues bien , será uno de los pueblos que nacieron bajo esta religión, los turcos, los que acabaron allá por el año 1453 con el dominio bizantino y por ende, con el último vestigio romano, claro sin contar a Berlusconi, digno sucesor de algunos emperadores romanos.
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